Cuando un sistema de aire acondicionado deja de funcionar correctamente, el confort del hogar o de un espacio de trabajo se ve directamente afectado. En épocas de calor, un fallo en el aire puede resultar una urgencia. Por eso, conocer cuánto cuesta arreglar un aire acondicionado te ayudará a actuar con rapidez y a planificar tu presupuesto de forma realista.
En este artículo te explicamos los tipos de averías más comunes, los precios orientativos de cada una, factores que influyen en el coste y cuándo conviene reparar o sustituir el equipo.
Principales averías del aire acondicionado
No todos los problemas de un aire acondicionado requieren el mismo tipo de intervención. Algunas averías son simples y económicas, mientras que otras pueden resultar costosas o requerir la sustitución de piezas importantes.
1. Fugas de gas refrigerante
Una de las causas más comunes de pérdida de rendimiento es la fuga de gas. El equipo deja de enfriar bien o funciona de forma intermitente. Requiere localizar la fuga, repararla y recargar el gas.
- Precio aproximado: entre 100 € y 300 €
2. Fallo en el compresor
El compresor es el “motor” del sistema. Si está dañado, el coste de la reparación puede ser elevado, especialmente si es necesario cambiarlo.
Precio estimado: de 250 € a 500 € (dependiendo del modelo)
3. Termostato o sensor defectuoso
Si el aparato no responde bien a los ajustes de temperatura, es posible que haya un fallo en el termostato o en uno de los sensores internos.
Precio aproximado: entre 60 € y 120 €
4. Problemas eléctricos
Incluye fallos en la placa electrónica, fusibles o conexiones eléctricas. Requiere revisión técnica especializada.
- Precio medio: entre 100 € y 200 €
5. Limpieza y mantenimiento interno
Suciedad acumulada en filtros, serpentines o turbinas puede reducir el rendimiento del equipo. En estos casos, una limpieza profesional puede solucionar el problema sin necesidad de cambiar piezas.
- Precio típico: entre 50 € y 100 €
Factores que influyen en el precio de la reparación
El coste de arreglar un aire acondicionado no depende únicamente del tipo de avería. Otros factores que influyen son:
Tipo de sistema
- Split mural: los más comunes y económicos de reparar.
- Multisplit: más complejos, especialmente si la avería afecta a varias unidades.
- Por conductos o cassette: requieren mayor intervención técnica.
- Portátiles: en muchos casos no compensa su reparación.
Marca y modelo del equipo
Algunas marcas tienen piezas más caras o difícil acceso a repuestos. También influye la antigüedad del sistema.
Accesibilidad de la instalación
Un aire acondicionado instalado en altura o de difícil acceso implica más tiempo de trabajo y puede requerir medios especiales.
Ubicación geográfica
El precio de la mano de obra varía según la región. En ciudades grandes o zonas de alta demanda, los costes suelen ser más altos.
¿Reparar o sustituir el aire acondicionado?
Es una de las decisiones más comunes cuando el aire acondicionado comienza a fallar: ¿merece la pena repararlo o es mejor invertir en uno nuevo? La respuesta no siempre es sencilla, ya que depende de varios factores clave como el coste de la intervención, la antigüedad del equipo y su eficiencia energética.
¿Cuándo es recomendable reparar?
Optar por la reparación suele ser la mejor decisión en los siguientes casos:
El equipo tiene menos de 10 años y no presenta un historial de averías recurrentes.
La avería es puntual (por ejemplo, una fuga o un sensor defectuoso) y no compromete componentes críticos como el compresor.
El coste de la reparación es razonable, es decir, no supera el 30-40% del precio de un sistema nuevo con características similares.
Reparar puede ser una opción rentable si el equipo aún tiene vida útil por delante y la solución es técnica y económicamente viable.
¿Cuándo conviene sustituir?
En cambio, invertir en un nuevo sistema es más sensato si se presentan las siguientes condiciones:
La antigüedad del aire acondicionado supera los 12 años, y su tecnología ha quedado obsoleta.
El consumo energético es elevado, lo que impacta directamente en la factura eléctrica.
Las averías son frecuentes o afectan a componentes esenciales como el compresor o la placa electrónica.
Además, cambiar el equipo por uno más eficiente puede suponer un ahorro significativo a medio y largo plazo, tanto en mantenimiento como en consumo eléctrico.
Consejos para evitar averías frecuentes
- Realiza mantenimientos periódicos: limpia filtros y revisa el estado del equipo al menos una vez al año.
- Evita forzar el aparato: no lo uses por encima de su capacidad o en ambientes excesivamente cerrados y calurosos.
- Contrata revisiones profesionales: una revisión técnica preventiva puede detectar fallos menores antes de que se conviertan en averías graves.
Conclusión
Arreglar un aire acondicionado puede costar entre 50 € y 500 €, dependiendo del tipo de problema, el sistema y la intervención necesaria. Una reparación a tiempo puede alargar la vida útil del equipo y mantener el confort de tu hogar sin necesidad de grandes inversiones.
Antes de tomar una decisión, compara presupuestos, valora el estado general del sistema y considera si merece la pena reparar o renovar. La clave está en actuar con rapidez y contar con profesionales de confianza.